¿Cuán importante es saber elegir a quien produzca junto a tí? ¿Qué tendrías en cuenta a la hora sumar un miembro a tu equipo? La autora recolectó varias historias de duplas podcasteras y habló con sus protagonistas sobre cómo les afectó esa decisión.
Por Lorena Huerta, colaboradora en residencia desde Chile.
Iniciar un podcast con un amigue suena tentador, en especial si hay química y conversaciones que pensamos le podrían resultar interesantes a una audiencia, al hacerlo le estamos abriendo camino a un millón de posibilidades. No solo con el proyecto, sino también con nuestro compañere. Me pregunté cómo la producción de un podcast puede afectar la relación que tenemos con alguien, para ello entrevisté a tres equipos de podcast distintos en donde el vínculo entre sus miembros es un factor clave: Caseritas, Relato Nacional y Rancheros Tiernos.
Caseritas | Un podcast de amigas
La idea surgió por el podcast Caseritas, lo conocí porque sigo a Eleonora Aldea (Nori), autora de Especimen y diseñadora enfocada en el lettering. Así mismo me enteré que tenía un podcast con su amiga Isidora Urzua, quien es periodista y ha trabajado en diversas radios desde el 2007. En este programa hablaban sobre varias cosas, pero sobre todo de maternidad.
“El podcast partió cuando yo estaba embarazada de mi primer hijo así que esto fue en el 2016, más que nada porque con la Nori éramos las únicas mamás de nuestra edad y era un tema para nosotras la maternidad millennial, joven. De hecho, seguimos siendo las únicas mamás del grupo de amigas”, me cuenta a través de zoom Isidora Urzua desde el patio de su casa, mientras sus hijos juegan.
Urzua estaba finalizando otro programa en Súbela Radio cuando le dijeron que si tenía alguna idea era el momento para probar: “Caseritas era lo que estaba agarrando más vuelo y tenía sentido para mí desarrollarlo más y la Nori igual se motivó, así que ahí nos metimos y así fue como llegó. Yo le vi un potencial y la Nori también en ese momento. Creo que nunca pensamos que iba a llegar donde llegó”. Desde ese verano de 2018, cumplieron lo que podría considerarse un sueño para la mayoría de los podcaster@s, llegar a la radio. Hasta la fecha se transmite de lunes a viernes a las 12:00 del día.
Caseritas tuvo una excelente recepción en redes sociales, le llegaron propuestas de diversa índole, en el segundo año del programa a ambas locutoras les habían ofrecido escribir un libro con editorial Planeta, también un proyecto con una importante cadena de supermercados, hicieron un evento en vivo con su audiencia y tenían más proyectos en camino. Urzua estaba cumpliendo su sueño, pero su compañera, Nori, empezó a preocuparse por el nivel de compromisos que estaban asumiendo. Ya no estaba cumpliendo con hacer los diseños para el programa y se empezó a generar una tensión entre ambas. Poco antes de que iniciara la temporada 2020, Eleonora Aldea publicó en su Instagram que no iba a seguir en el programa y explicó: “La razón de mi salida son básicamente distintos puntos de vista y expectativas con respecto al programa que nunca pudimos conciliar. Por lo que prefiero restarme y dejar que el Caseritas crezca todo lo que tenga que crecer con la Isi a la cabecera”.
Al consultarle a Isidora Urzua, ella menciona que el quiebre se debió a muchas cosas. Recién en marzo, un año después de que Aldea dejara el programa, hicieron un episodio especial explicando a sus oyentes qué fue lo que pasó. Urzua me cuenta que ella ve Caseritas como algo más allá de un programa de radio o podcast: “Tiene que ver con una comunidad y con una forma de pensar, yo eso lo veía, veía el potencial. Para mí esto puede llegar a ser una fundación”. En este sentido aclara que ella disentía respecto a su amiga: “(…) yo lo veía como algo más espiritual, y ella lo veía como algo laboral, para ser bien honesta. Porque en el momento que ella lo veía como algo donde había que comprometerse, cumplir plazos, horarios y cosas así, eso es lo que a ella le molestaba. Para mí era solamente un medio para llegar al fin, que era como la construcción de algo que hace sentido en el mundo en el que estamos ahora”.
Isidora Urzua optó por seguir el programa en solitario, está todos los días en Súbela Radio. “Fue super doloroso. Lloraba un montón, entre canciones tenía mucha pena”, relata Urzua sobre aquel momento y explica que piensa en la salida de su compañera como una separación matrimonial: “Debe ser parecido a divorciarse y seguir viviendo en la misma casa, y tener que hacer la tuya. Cómo redecorar, cambiar los muebles, pintar”.
Después de un tiempo las cosas mejoraron gracias a su audiencia: “Me di cuenta que todavía había algo que unía todo y había también un humor que se podía hacer. El dolor, la sanación. Creo que fui super abierta con mi proceso de sanación al aire, desde las canciones, las veces que hablé de ella abiertamente, nombrandola y todo, aún cuando nosotras no nos hablábamos. Porque nosotras nos demoramos alrededor de seis, siete meses en volver a hablar”. De todo esto, saca haber aprendido “que todo pasa por algo, y eventualmente todo cuaja”.
Relato Nacional | ¿Qué puede brindar un compañero?
La cuarentena en Santiago impide que pueda reunirme con Nancy Castillo, periodista y directora del podcast de crónica sonora Relato Nacional, pero vía zoom, me responde que siempre dos cabezas son mejor que una: “Todo mi camino de inicio fue solitaria. Pero trabajar con alguien es más agradable, porque tienes otra oreja, hay otro que va a escuchar. Una retroalimentación respecto al producto, alguien que también está contigo haciéndolo. Es super sincero y transparente en la crítica”, y agrega: “Es más entretenido. Te da más ánimo y te da ganas de crear, de seguir adelante con el proyecto”.
Desde el 2013 que Nancy Castillo tenía ganas de hacer un podcast similar a This American Life, ya tenía experiencia trabajando en radio y prensa escrita, por lo que quería unir ambos mundos. Desarrolló un episodio piloto, se sentía lista para iniciar un proyecto. Consideró que, por todo el tiempo y esfuerzo que requiere producir un podcast de crónica sonora, necesitaría buscar a alguien más con quien trabajar.
Así fue como invitó a la periodista Josefina Aguirre al proyecto, con quien ya había trabajado antes en una revista. Para Castillo, era importante que Aguirre también vibrará con el proyecto. Algo interesante es que entre ambas hay una diferencia de 15 años, y eso: “funciona super bien, porque nos completamos en varias cosas. Para Jose es super natural las redes sociales, el tema en general de edición o cosas más técnicas, le es mucho más natural que a mí”, cuenta Castillo desde su departamento y agrega: “es una generación distinta a la mía, y eso es importante porque también te da otra mirada, te mantiene, te hace mirar otros lugares, o mirar las cosas con otra perspectiva”.
Al comparar un podcast de conversación con uno de crónica sonora, donde quien produce está “detrás” del podcast, puede ser más difícil para el oyente notar la ausencia de una persona del equipo. Al preguntarle al respecto a Castillo, ella comenta que justamente su compañera ahora está con licencia por postnatal: “era super complejo para mí estar sola. Son muchas cosas, producción de capítulos, estar hablando con los periodistas, armar reuniones de pauta, ver cómo van avanzando, ver el tema de las grabaciones, ver el tema del financiamiento.. Era demasiado”. Finalmente optó por sumar a alguien más en el equipo, y destaca que lo importante es que siempre alguien lleve la identidad que han creado como Relato Nacional.
Rancheros Tiernos | Tiempos inalcanzables
El caso de Arturo Mendez, artista visual, fue distinto, él tenía claro que quería hacer un podcast de conversación con su mejor amigo: “Tenemos un entendimiento del humor muy similar y somos capaces de improvisar muy bien”, y así fue como crearon Rancheros Tiernos, el cual graban a distancia, Mendez desde Vancouver, Canadá y su compañero desde Sonora, México.
El artista dice que sus personalidades y sus roles en el programa son distintos: “Él tiende más a ser una persona que está en el computador dentro de su casa, está muy enfocado en las herramientas y el software. Él tiene ese complemento, que yo no. Sabe más lo técnico, mucho de editar audio. Pero a la hora de encender el micrófono, yo soy la chispa”, reconoce.
Me confiesa que desde que empezó la pandemia comenzaron a tener problemas de tiempo y a cuestionarse el proyecto. Sin embargo, Mendez agradeció la experiencia en el podcast y poder ver a su mejor amigo en otra dimensión: “Hemos tenido la oportunidad de pelear, cosa que no había pasado antes. Discutir sobre cosas, tomar decisiones juntos, argumentar cuál es el futuro del podcast. Eso mejoró nuestra relación mil veces. Nos cambió la manera de ver nuestra amistad y a su vez, el podcast se ve muy enriquecido de que somos amigos”.
En el caso de Rancheros Tiernos, las dificultades continuaron y no pudieron grabar durante cuatro meses: “Al principio era algo que nos apasionaba, que nos gustaba y que disfrutamos, pero conforme empezamos a tener la presión de trabajar en el podcast, se empezó a sentir como trabajo, estábamos presionados en sacar el episodio y nos afectó eso”.
Algunos consejos
La locutora de Caseritas da varias sugerencias cuando pregunto qué le aconsejaría a las personas que están pensando en comenzar un programa con otre, “Hazte algunas preguntas ¿Cuáles son tus expectativas?, ¿Por qué estás haciendo esto?, ¿A dónde queremos llegar? Si es solo pasarlo bien, pasemoslo bien”.
Otra cosa que destaca es definir qué tan personal van a ser las cosas personales del podcast: “Va ser solo opiniones o vamos a hablar de nuestras vidas. Yo creo que esas son conversaciones importantes. Donde vamos a llevar el límite de nuestra amistad, ¿vamos a mostrar nuestra amistad o ser solo profesionales?”
La periodista también recalca lo fluida de su amistad con Aldea “Hablábamos de cualquier cosa, si tu escuchabas al aire, cuando no estábamos de acuerdo, peleábamos al aire, discutíamos al aire, y salíamos y éramos perfectamente amigas porque podíamos estar en desacuerdo”, recuerda la locutora de cuando animaba el programa en compañía. “Teníamos la capacidad de estar en desacuerdo y yo creo que eso en general, se lo voy a recomendar a una persona que quiera hacer un podcast, que quiera tener hijos o casarse o hacer cualquier cosa con alguien más”, añade.
Méndez por su lado, cree que es importante tener tiempos de vida similares: “Yo soy una persona soltera, que vive acá en Canadá, trabajo desde mi casa como freelancer, él está casado, tiene dos niños, uno de dos años, y trabaja para una empresa, entonces eso es un tema. Los horarios y las responsabilidades son diferentes y empezó a tornarse complicado”.
Cosas que considerar antes de comenzar un podcast con otra persona
- Que ambas tengan la idea del podcast clara.
- Considerar el ritmo de vida de cada una.
- Tener química
- Pensar cuáles son sus expectativas del proyecto.
- Tener apertura para colaborar con alguien distinto a uno/a.
- Definir qué tan personal va a ser y que están dispuestos a exponer.
¿Es realmente necesario tener un compañero de podcast?
Al igual que muchas cosas dentro del mundo del podcast, al momento de buscar a alguien con quien desarrollar nuestro proyecto no existe una receta perfecta para el éxito. Siempre es bueno aventurarse a probar, el resultado traerá aprendizaje en el proceso.
En mi caso, cuando inicié mi podcast no sabía cómo comenzar, no me hice mayores proyecciones en ese momento. Y quizás fue positivo vivir toda esa etapa inicial sin presiones o compromisos más que acostumbrarme a hablar frente a un micrófono. En mi podcast Pájaro Periférico converso con un escritor/a distinto/a cada semana, y he aprendido habilidades que me serán útiles si quiero comenzar otro proyecto con alguien más. Ya sea con un compañero, amigo o en solitario siempre podrás llevarte algo contigo de la experiencia.
Si tenemos una idea concreta de nuestro proyecto, objetivos claros, antes de incluir a alguien es importante que esa persona se sienta igual de involucrada y motivada. Sino, siempre se va a sentir disparejo. Para incluir a alguien en ese espacio es necesario que esa persona vibre igual que nosotros con el podcast.
(*) Lorena Huerta. Productora y host del podcast de entrevistas “Pájaro Periférico” desde el 2018, centrado en autores latinoamericanos. A finales del 2020 fundó la productora sonora con el mismo nombre, donde edita y graba el podcast “Mundo BeFX” sobre inversiones, y colabora en el programa “Por una Constitución Feminista”. @delahuertasegur